Tarde por la tarde
La luz amarilla proyectada en el suelo se refleja en nuestros dedos largos y en la partida de cartas a medias con las piernas cruzadas y las espaldas apoyadas en la pared, con Lost in translation de fondo y de forma. Me tapo los ojos y las orejas y la nariz y nos escondemos detrás del respaldo del sofá, jejeje, que no nos encuentren.
Fuera partida de cartas; hablemos de la diferencia entre los flanes caseros y los otros, de lo que vamos a hacer en nuestro cumpleaños, todo regado con la luz amarilla que se proyecta en el suelo y el olor del café con leche de la taza que tengo en la mano.
Ala, aparta la luz que nos quedamos ciegos, jejeje, me gustan todos esos lunares. Silencio. ¿Y si lo dejo? ¿El qué? Nada. Y todo.
Todo menos sentarnos aquí en la luz amarilla de detrás del sofá con una taza de café con leche y los lunares puestos.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home