Réquiem por los sugus

Migrañosa y con paso atlético me he dirigido hace unos minutos a la tienda de chuches con el propósito de comprar unos apetitosos Sugus
cuando me la señora Tere, dueña de la tienda de chucherias (y esposa del dueño del cine) me ha comunicado una fatal noticia: NO HACEN MÁS SUGUS.

Perpleja y estupefacta he recibido la noticia, esperando que detrás de los expositores de chicles Orbit y Chupa Chups saliera el presentador de algún tipo de porgrama de cámara oculta, pero no. La señora Tere ha procedido a explicarme las razones del desastre: según ella (una fuente totalmente fidedigna) no-se-qué empresa ha comprado Sugus y ha decidido que, hasta el año que viene, no se fabrican sugus.

Y yo me pregunto: ¿no será esto algun tipo de conspiración, al más puro estilo Familia Corleone, para acabar con el caramelo que claramente llevaba ventaja en las ventas, el más popular en las bolsas de cumpelaños, el que los Reyes Magos utilizan como proyectil en las cabalgatas? ¿Quién va a reemplazar a nuestro querido sugus de piña, con ese extraño sabor indescriptible? Y por último, ¿no será que la señora Tere me odia por algún tipo de razón, y ha querido causar mi desesperación contándome la bola sobre la extinción de los sugus?

Sea como sea, lo cierto es que yo me he tenido que volver a casa con una bolsa de 'Chispitas Dulciora', caramelos ácidos e inmasticables donde los haya.